Terra: "Una película que muestra a un soldado estadounidense disparando accidentalmente a una niña durante una redada en Irak podría no coincidir con la idea que todo norteamericano tiene sobre un posible ganador del Oscar.
El hecho que haya sido escrita y dirigida por un iraní hace de "Farewell Baghdad", la descarnada historia sobre estadounidenses en Irak, aún más controversial.
Pese, o tal vez debido a eso, la película constituye la postulación oficial de Irán para los premios de la Academia de 2011, algo que según su director de 37 años provoca "malos entendidos".
"Hay personas que creen que he recibido mucho dinero para hacer esta película para el Gobierno iraní. Claramente esas personas no han visto la película", dijo Mehdi Naderi.
Lejos de ser propaganda estatal, Naderi dice que al rodar su filme, que explora la motivación y las dudas tanto de soldados estadounidenses como de insurgentes iraquíes, enfrentó una poco útil presión de las autoridades y contó con un escaso presupuesto.
"El presupuesto para 'Farewell Baghdad' puede compararse a lo que Sean Penn gasta en sus cigarrillos o a lo que Nicole Kidman gasta para una pequeña parte de su maquillaje", dijo a Reuters el director en una entrevista en una cafetería de Teherán.
La película sigue al polaco-estadounidense Daniel, un boxeador fracasado que se alista en el Ejército y se encuentra a sí mismo en tensas patrullas a pie en Irak. Luego de que un camarada disparase accidentalmente a una niña pequeña en su casa, ambos hombres dejan su base y se pierden en el desierto.
Eventualmente, la vida de Daniel es salvada por Saleh, un aspirante a atacante suicida que odia a los estadounidenses pero se siente obligado a ayudar a otra alma perdida.
Guerra blanda
Dada la enemistad de 30 años de Irán con Estados Unidos, al que a menudo se le llama el "Gran Satán", podría asumirse que un filme del país sobre la larga y dolorosa participación de Washington en Irak mostraría a los estadounidenses como los villanos que oprimen a otra nación musulmana.
Pero "Farewell Baghdad" no ofrece una imagen simplista de los estadounidenses como los malos. Daniel es descrito como un tipo normal que intenta lidiar con el entorno violento y extraño en el que se encuentra.
"No quiero que mi película sea vista como una herramienta de guerra blanda contra Occidente," dijo Naderi, instando a los espectadores a ver más allá de la política y reconocer la historia humana donde ambos lados, iraquíes y estadounidenses, puedan aprender a ser amigos, aún en circunstancias extremas.
El cine es un negocio complicado en Irán, donde el Gobierno está muy atento al contenido político y realiza controles para asegurarse de que las normas islámicas, como el código de vestimenta para mujeres, sean respetadas.
El Estado ha aumentado la presión sobre los cineastas desde las controvertidas elecciones presidenciales del año pasado a las cuales siguieron de las mayores protestas callejeras desde la revolución de 1979, que dio lugar a la primera República Islámica del mundo.
"Tardamos seis años en obtener el permiso para hacer este filme y cambiamos el guión unas 18 veces para satisfacer a las autoridades (...) Quiero mostrar cómo un cineasta iraní puede hacer una película sin apoyo financiero en menos de dos meses desde un país con muchas reglas y censura", dijo Naderi.
Un funcionario de la industria cinematográfica iraní dijo que el "contenido anti-estadounidense" de "Farewell Baghdad" podría mejorar sus posibilidades para ganar un Oscar.
"Los Oscar establecen una nueva política cada año y usualmente los países no están al tanto de éstas", dijo Shafi Agha Mohammadian, jefe de una entidad estatal que promueve documentales, en una entrevista con el diario Mardomsalari.
"Creemos que actualmente hay una política de oponerse al despliegue de fuerzas militares estadounidenses alrededor del mundo, un sentimiento que también comparte Hollywood," agregó.
Cárcel
Jafar Panahi, uno de los más reconocidos directores de Irán y ganador de varios premios internacionales, enfrentará un juicio por hacer una película sin permiso del Gobierno.
"Mi caso es un ejemplo perfecto de ser castigado antes de cometer un delito. Me están llevando a juicio por hacer una película que, al momento del arresto, estaba filmada sólo en un 30 por ciento", dijo en una declaración pública a la corte.
El caso de Panahi recibió cobertura internacional luego de que se le impidió salir de Irán para asistir al festival de cine de Venecia en septiembre. El director estadounidense Steven Spielberg y la actriz francesa Juliette Binoche fueron algunas de las personalidades que lo defendieron.
Pero es poco probable que el filme de Naderi capte mucha atención en Hollywood.
Antes de "Farewell Baghdad", otra película iraní sobre Irak, "Turtles can Fly", fue presentada como postulante de Irán para el Oscar a mejor película extranjera de 2004. Se enfocaba en las víctimas kurdas del régimen de Saddam Hussein y de la invasión estadounidense a Irak. No fue preseleccionada.
"Farewell Baghdad" es una de las 65 películas presentadas para el premio este año. Sólo cinco de ellas recibirán la nominación oficial para la estatuilla dorada.
Pero, con o sin el premio, Naderi está orgulloso de haber terminado un filme que describe como un llamado a la paz, algo que hace mucha falta en Oriente Medio.
"Si Marco Polo comenzara su vuelta al mundo en el presente, no tendría éxito ya que probablemente sería asesinado antes de llegar a Bagdad," concluyó."
18 de diciembre de 2010
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