Los Angeles Times: "Para un director que es conocido por su falta de amor al sensacionalismo, Clint Eastwood está sorprendiendo ahora a mucha gente.
La nueva película del cineasta es un examen en negrita de las preocupaciones espirituales, algo que a la industria del cine normalmente le asusta demasiado. Como la película está en el umbral entre el éxito y la decepción, los críticos están muy divididos. Pero no están divididos de la forma habitual. Están divididos, al parecer, a lo largo de líneas generacionales.
La nueva película del cineasta es un examen en negrita de las preocupaciones espirituales, algo que a la industria del cine normalmente le asusta demasiado. Como la película está en el umbral entre el éxito y la decepción, los críticos están muy divididos. Pero no están divididos de la forma habitual. Están divididos, al parecer, a lo largo de líneas generacionales.
A la mayoría de los críticos "seniors" les gusta la película, pero no así a los más jóvenes.
Es una división de confusión. La simple explicación, supongo, es que una película preocupada por la mortalidad será más atractiva para espectadores mayores de edad que para los más jóvenes. Sin embargo, los jóvenes piensan sobre la mortalidad también. Y sería un flaco favor para los mayores críticos que les gustara una película sólo porque habla del tema de la muerte. Es una teoría, de todos modos.
Las películas hasta ahora de Hollywood que hacen frente a la vida después de la muerte - desde "El sexto sentido" al "El cielo puede esperar" - tienden a ofrecer una visión del mundo tranquilizadora. No importa lo que hacemos en esta vida, dicen, porque hay tiempo para corregir nuestro camino. Eastwood no ofrece eso. Y es ahí donde la película puede atragantársele a muchos. "
Es una división de confusión. La simple explicación, supongo, es que una película preocupada por la mortalidad será más atractiva para espectadores mayores de edad que para los más jóvenes. Sin embargo, los jóvenes piensan sobre la mortalidad también. Y sería un flaco favor para los mayores críticos que les gustara una película sólo porque habla del tema de la muerte. Es una teoría, de todos modos.
Las películas hasta ahora de Hollywood que hacen frente a la vida después de la muerte - desde "El sexto sentido" al "El cielo puede esperar" - tienden a ofrecer una visión del mundo tranquilizadora. No importa lo que hacemos en esta vida, dicen, porque hay tiempo para corregir nuestro camino. Eastwood no ofrece eso. Y es ahí donde la película puede atragantársele a muchos. "
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